La selectividad 2020 llega con novedades, más sedes, más distancia y más fácil de aprobar.
Los estudiantes realizarán la prueba del 7 al 9 de julio entre facultades, centros adscritos e institutos y será obligatorio el uso de mascarilla.
La prueba que se desarrollará casi un mes después de la fecha habitual, debido a la suspensión de clases presenciales ocasionada por la crisis sanitaria del covid-19, se adapta al protocolo sanitario.
El principal criterio para la elección de nuevas sedes es reducir la movilidad en lo posible y las aglomeraciones excesivas, por lo que la distribución del alumnado en más espacios físicos es clave.
Por otra parte alumnado con nota de 2019 temen una subida de notas generalizada, ante la posibilidad de que la prueba esta edición sea más fácil. La ministra de Educación ya apuntó en marzo que la prueba se celebrará “en circunstancias normales” y la diferencia podrá ser la “opcionalidad”. “No pretendemos ‘pillar’ al estudiante en los objetivos transmitidos”, aseguró Isabel Celaá. En este sentido, Educación no plantea una prueba más fácil pero sí más flexible.
